Muchas cervecerias suelen indicar su fecha de fundación en
las etiquetas de sus productos. En la mayoria de los casos eso se hace
para indicar al comprador que las cervezas que compre bajo esta marca son
de larga tradición. Algunas cervezas incluso incorporan alguna forma
de viejo, old, oud, alt o owd para indicarnos que su crudo está
hecho con recetas antiguas. Y con eso quieren indicarnos que el producto,
al respetar recetas provectas, es de buena calidad. No es que no sea cierto,
pero cabe estar al tanto.
La tradición es un producto que vende, y que vende bien. Un
poco como los muebles de anticuario, que por ser viejos, son buenos y caros.
Muchas veces puede ser cierto, pero muchas veces se exagera la vejez para
cobrar mas, prescindiendo de la cualidad real. Como mas viejo mas caro.
En las cervezas como en muchas cosas, la gente se refirere al hecho
que antiguamente, las cosas se hacian posiblemente con mas amor y mas dedicación
y en cantidades mas modestas. Entendemos con ello que la producción
industrial se ha cargado la calidad del buen hacer del artesano. Y en la
mayoria de los casos es cierto. No se puede elaborar un millon de hectolitros
con la misma materia prima y con la misma atención que quinientos
o veinticinco litros, aunque la tecnologia pueda compensar en parte el
ojo del maestro.
Hoy en dia, la cerveza occidental mas “antigua” que se pueda encontrar
en el mercado es el Lambic y la Gueuze. Estas cervezas se hacen con una
fermentación no controlada. Los fermentos que actuan en ellas son
aleatorios: caen en el mosto desde el cielo en la región de Bruselas.
Hay mas de cincuenta y hasta hace poco, los cerveceros se negaban a que
se hiciera un analisis para determinar cuales eran. Evidentemente se trataba
de protegir el producto de eventuales copias mas o menos conformes. Aún
así, el producto no es mas que imitable: cada país o región
presenta una fauna y una flora específicas autóctonas que
seria realmente muy artificioso y trabajoso reproducir con exactitud.
En todos los demas casos de crudos que se refieren a la tradición,
esta no va mas allá de mediados de siglo XIX, cuando se descubrió
el fenomeno de la fermentación. No sabemos de ninguna cerveza occidental
que se haga exactamente como se hacia en los tiempos remotos antes de la
fecha indicada. Hurgando en la história de la cerveza, observamos
que nunca ha habido un continuum entre las recetas del medievo o de antes,
entre las cervezas del siglo XVII o XVIII y las que se reclaman de la “tradición”.
Ni las copias o reproducciones supuestamente conformes de cervezas de la
antigüedad son realmente conformes. Todas se hacen con fermentos cuidadosamente
escogidos, y ninguna se ha hecho de forma continua y permanente hasta hoy.
En el mejor de los casos, las recetas que se habian dejado de hacer
hace muchísimo tiempo han sido recuperadas por cervecerias nuevas
y modernas y adaptadas al gusto de hoy. En efecto, en algunas zonas de
Holanda, Bélgica y Francia, para exportar una cerveza, habia que
registrar la receta, de manera que, encontrando los registros, uno puede
hacerse una idea de cómose hacia. Aún así hay que
“inventarse” un fermento pués no tenemos idea de los fermentos múltiples
que actuaban y en algunos casos, hay que “suponer” mas de una etapa de
la maceración y estimar mas de una cantidad expresada en términos
obsoletos. En definitiva, las reproducciones por acuradas que sean, son
aproximativas.
Es como en música: uno se refiere a la música celta,
pero los temas “tradicionales” célticos remuntan, siendo optimista,
al siglo XVI. En ningun caso estas melodias pueden referirse a temas que
debian estar de “moda” en Europa central antes del siglo VII y menos nos
podemos referir a la música “celta”de la época de máxima
extensión de la cultura celta: hace dos mil años. Pués
en aquellos entonces, la música no se escribia. Igualmente, a lo
que oimos hoy, se le dice música celtica. Principalmente porque
se toca desde años ha, en zonas donde esta cultura radicaba en tiempos
remotos.
Pasa lo mismo con la cerveza. Nadia sabe a ciencia cierta como era
la cerveza hace 500 o 1000 años. Nos podemos acercar y podemos suponer
muchas cosas. En esto nos ayuda la arqueologia. Pero ninguna receta de
hoy en dia se hace como entonces. Ninguna receta es la misma que aquella
a la que se refieren los productores cuando apelan a la “tradición”.
Hasta me atreviria a decir que hoy en dia no se hace ni la IPA como se
hacia en el siglo XIX!
No sabemos ni siquiera de ningún monasterio que se reclame
de la tradición que haya producido sin parar cerveza. Ninguno. Todos
han presentado parones debidos a acontecimientos políticos, sociales
o naturales. Muchas veces, hasta ha cambiado la congregación responsables
del cenobio.
Esto, evidentemente, no quita que pueda ser verdad que en tal sitio
se elaborara cerveza en épocas muy remotas. Es cierto que en la
época romana, habia una cerveceria en la zona de Newcastle, por
ejemplo. Pero queda claro que la Brown Newcastle Ale no es una receta que
remunte a otro momento historico que mediados de siglo XIX. Incluso, alguna
receta aparentemente “tradicional” o antigua fue inventada en el siglo
XX. En algun caso, el cervecero no dice nada de ello. Solo se aprovecha
de la propaganda en este sentido que hacen otras cervecerias que producen
crudos semejantes.
Es típico el caso de las cervezas de abadia y Trapistas. Siendo
la abadia antigua, el fabricante se aprovecha de esta senectud para “colar”
un producto de creación reciente. Esto no quita valor gustativo
al producto pero no tenemos que imaginarnos que estamos bebiendo como nuestros
antepasados o lo que bebian ellos. Puede que se parezca pero no es tal:
el fermento es cuidadosamente escogido, la técnica es depuradísima
y los ingredientes no se pueden comparar. Aúnque nos duela, hoy
las técnicas y las materias primas són infinitamente mejores,
y los productos son mas finos, elegantes, diferenciados o equilibrados
que los de la “tradición”.
Como deciamos pués en el principio: lo “tradicional” vende
y vende bien. Pero nosotros los degustadores, no paramos atención
a este aspecto pués no es engañoso pero poco le falta. Un
cerveza puede ser gustativamente atractiva sin referirse a ninguna tradición.
No nos hace falta. Basta que esté bien hecha, con amor, dedicación
y buen hacer. Y esto se nota.
Albert Barrachina Robert 2001
Albarrob@arenys.vilaweb.com
Catalunya
|